Intento integrar en este espacio informes, datos, opiniones, sobre el tratamiento de la Leucemia Mielóide Crónica en particular y del Cáncer en general y compartir las experiencias de vida, discutir los condicionantes socioculturales y medioambientales que determinan los tratamiento que realizan los pacientes. Aspiro a generar un espacio de comunicación con todos aquellos que como yo, realicen tratamientos por enfermedades graves. Sin pretensiones autoreferenciales, me dispongo a compartir con pacientes, familiares y médicos, la palabra, que acompañe este azaroso recorrido. Transito este tiempo con la enfermedad Leucemia Mielóide Crónica, Cromosoma Ph.+.

sábado, 22 de septiembre de 2012

El 22 de septiembre los grupos de defensa de los pacientes con LMC en todos los continentes celebran el "Día Internacional de Concientización LMC".

La fecha (9/22), simboliza el cambio genético de los cromosomas 9 y 22 que causa la leucemia mieloide crónica (LMC), se realizaran actividades de todo el mundo de sensibilización, estas acciones buscan aumentar la conciencia de este cáncer de la sangre poco común.

"Hace apenas 15 años, la LMC era una enfermedad mortal para la mayoría de los pacientes. Con el advenimiento de las investigaciones, la LMC se ha convertido en una enfermedad crónica manejable ", dice el profesor Tim Hughes, miembro del Consejo de la Fundación Internacional LMC y uno de los pioneros en la realización de ensayos con determinados tratamientos para la LMC en la década de 2000. "Cuando la LMC se detecta a tiempo y es bien tratada, los pacientes pueden esperar vivir una larga vida con buena calidad. Esta enfermedad se ha convertido en un modelo de la medicina personalizada para muchos tipos de cáncer" 
Sin embargo, aún queda mucho por hacer. Alrededor del 20% de los pacientes no responden o sufren de efectos secundarios fuertes. Además, una cura aún no se ha encontrado.
Síntomas de la enfermedad
La LMC presenta tres fases: una fase crónica que presenta pocos síntomas, una fase acelerada donde se detecta un aumento en el número de células inmaduras en la sangre, y una fase blástica, que simula una leucemia aguda y asociada a un mal pronóstico y mortalidad alta.
En el diagnóstico, la mayoría de las personas no presenta los síntomas de la enfermedad. Ante esto, la detección de LMC comúnmente ocurre mientras se realiza un examen de rutina o se está tras la búsqueda de otro padecimiento. Dentro de los posibles síntomas, se puede mencionar:
• Cansancio inusual
• Pérdida de peso inexplicable
• Sudoración nocturna
• Dolor abdominal
• Piel pálida
• Esplenomegalia (un bazo más grande de lo normal )
• Saciedad temprana
• Fiebre